Reiji observó la escena. Todo se había vuelto un caos de golpe. Intentó reordenar lo sucedido dentro de su cabeza.
Su misión era agarrar al Player llamado Gambit y avisarle de que se fuera con él del Game. Que abandonara todo, que se olvidara de todo lo que había sucedido y después ya vería si debía llevarlo a Sekai o dejarlo allí. Sin embargo, debió llegar en un momento pésimo por algo de un “Killer” que “iba a matarlos a todos”. El “Bruto” cogió al compañero del Player, Sopho, y le comenzó a decir… Cosas. Después, un tío con una katana y un encapuchado habían surgido de la nada para ver cómo se sucedían las cosas, y ahora Sopho llamaba “papá” al “Bruto”. Definitivamente, Reiji se había perdido algo en todo aquello.
Aquella mezcla de locuras, junto con el tipo que no paraba de reír la noche anterior, hicieron que Reiji se estuviese planteando largarse de aquella isla. Que le dieran a la misión.
-Esto es un juego de locos –susurró, intentando todavía entender lo que sucedía.
The Death mantuvo la espada en alto, preparado para recibir a Samurái en cualquier momento y de espaldas a Gambit. El Killer podía surgir de un momento a otro, y él sabía que iría directo al chico.
-¿Qué haces aquí? –preguntó el Player. El encapuchado le ignoró.
-Así que nuestro Bruto es el padre de Sopho –señaló the Death, pretendiendo distraer a Gambit. Esto hizo que el Player volviera a dirigir la vista a su compañero.
Sopho seguía sollozando. Era incapaz, realmente incapaz de creer lo que pasaba. ¿Se refería Sponsor a aquello cuando le dijo que en la isla había alguien que le buscaba…? ¿No podía escapar de él, ni siquiera tan lejos? ¿Estaba en el Infierno y por eso le tenía delante, o había sobrevivido al disparo de la escopeta hacía un mes?
-Deja de llorar, hijo –le ordenó Bruto-. Me disparaste. Sobreviví gracias a Sponsor, al que le debo tantas cosas ya. Le conocía de antes, y creía que era un capullo, pero resulta que sabe qué amigos tener.
-Esto es una pesadilla… -susurró Sopho.
-No, Sopho. ¡Es un sueño hermoso! Diste la cara, te enfrentaste a mí y te convertiste en un hombre por lo que le hice a tu madre. Ahora tenemos la oportunidad de volver a comenzar.
Bruto agarró de la mano a Sopho.
-Voy a hacerte un hombre a mi imagen y semejanza.
-¡No quiero ser como tú! –gritó el muchacho, apartando su mano de él.
Aquello sorprendió a Bruto. Su cara reveló un gran disgusto que no tardó en convertirse en triste.
-Me has decepcionado, hijo –señaló él, apretando su puño-. Me has decepcionado… ¡Mucho!
Bruto golpeó la cara de Sopho. Éste chocó con la pared, a su espalda, y vio cómo el Killer volvía a acercarse a él para agarrarle por la ropa, elevarle y pegarle otra vez en la cara. Gambit dio un paso para socorrer a su amigo, pero un silbido sonó del otro lado de la carretera.
Samurái estaba sobre la acerca, mirando fijamente a Bruto. Gambit le observó detenidamente. Vio su pelo, su ojo.
-No puede ser… -susurró. The Death se dio cuenta y Gambit se lanzó en dirección a Samurái. El encapuchado lo agarró la cintura, deteniéndolo.
-¡No vayas! –le pidió. Gambit intentó resistirse, sin éxito.
-¡Sabía que había visto esa katana antes! –gritó- ¡Suéltame! ¡Tengo que comprobarlo! ¡Tengo que saber si es él!
-¡No lo hagas! –gritó the Death.
Samurái sonrió directamente a los dos Players. Dedicó un vistazo a Bruto y le hizo una seña.
-Sponsor quiere vernos –señaló-. Ahora.
Bruto gruñó y soltó a Sopho. Éste, sollozando, se le quedó mirando.
-Acabarás viniendo conmigo, hijo –le aseguró-, y te haré un hombre.
Con aquellas palabras, Bruto se dirigió al lado de Samurái. Éste dio la espalda a the Death y a Gambit, el cual seguía luchando.
-Eres tú, ¿verdad? –gritó en dirección a Samurái- ¡Eres tú!
Los Killers echaron a andar, desapareciendo entre los edificios. Gambit logró liberarse al fin y se tiró al suelo, lleno de rabia. Gritó al cielo con furia, lleno de frustración. Sólo quería soltarlo. Descubrir la verdad era demasiado doloroso.
-¡Eres mi hermanooo!
Madmahon observó fijamente a Neipol. Respiraba aliviado de que no le hubiese tocado la bala. Seguramente pensaba en cómo sería el mundo sin él, en qué haría la chica si aquella hubiese sido la bala. Movió la ruleta él mismo para coger el revólver.
-Me has preguntado por mis sueños –señaló Mad, mirando el revólver-. ¿Qué me dices de los tuyos?
Neipol respiró con fuerza. Pensó en contestarle a aquel loco que no le importaba, pero le dio igual por algún motivo.
-Volver a ver a mi hermano –explicó él-. Tiene todas sus esperanzas depositadas en mí. Cree en mí, en lo que hago. Quiero ver su sonrisa al volver, oírle decir… “Lo lograste”. Ser su héroe.
-Parece que admiras mucho a tu hermano.
-También… Estar con Samara –continuó Neipol-. Por algún motivo, quiero seguir viéndola. Quiero asegurarme de que no le pasará nada… Porque me sentiría culpable. Quiero protegerla.
Madmahon colocó el revólver bajo su mandíbula.
-Seré sincero –dijo, borrando su sonrisa-. Si ganas, las probabilidades de salvarte son mínimas. Que Despertar actúe sobre ti con éxito es poco probable, y aunque lo logre, no te quedarán más que unos pocos años de vida y viviéndolos de mala manera.
Mad apretó el gatillo. Tal y como esperaba, no sucedió nada. Dejó el revólver sobre la mesa de la ruleta y la giró para que su contrincante la recogiera.
-Tu única alternativa es abrazar al veneno que hay en tu interior y dejarte dominar por él.
Neipol no comprendió las palabras de Madmahon. El Player volvió a sonreírle con su característica sonrisa.
-Morir –aclaró.
Neipol se colocó la punta del arma en la frente. Nuevamente, los temblores comenzaron. Una gota de sudor frío recorrió la frente hasta su ceja izquierda.
Abrazar la muerte. La verdad es que prefería morir con una bala en la cabeza antes que dejarse dominar por un veneno que le matara poco a poco, dándole los peores días de su vida. Tragó saliva. Notaba cómo aquella maldita pesadilla recorría sus venas, intentando controlar su sistema nervioso. Se sentía débil.
Apretó ligeramente el gatillo. El corazón iba a salir por su boca de un momento a otro. ¿Qué vendría después…?
Pam.
-He ganado.
Aquellas palabras no venían de la boca de Madmahon. Neipol apartó el revólver de su frente. Se sentía seguro, se sentía fuerte. Sabía lo que estaba pasando. Mad no pudo dejar de sonreír, con los ojos clavados en su contrincante.
-Así que te has dado cuenta –señaló. Neipol afirmó con la cabeza.
-Debería haber comprobado el cargador desde el primer momento –contestó él-. Seis disparos. Una bala. Pensé que éste sería el quinto, pero no. Éste sería el sexto y último, porque nos “disparaste” a Samara y a mí al principio.
Mad echó una pequeña risita de la boca.
-Vaya. Me has dejado en evidencia.
-Al empezar dijiste que ganaba el que descubriera cuándo saldría la bala –recordó Neipol-. Lo he hecho. O está aquí, o no hay bala. He ganado.
-Bueno, sólo hay un modo de estar seguros, ¿no?
Neipol afirmó con la cabeza. Apuntó hacia su contrincante.
-Se acabó, Madmahon.
El Player simplemente sonrió.
-Espero que hayas aprendido algo de esta partida, Christian –rezó Madmahon-, porque eres el primer y último humano que me ha ganado.
Neipol afirmó con la cabeza.
-Ahora sé lo que debo hacer.
-Pues adelante.
-¿Unas últimas palabras?
Madmahon sonrió. Era una sonrisa de tranquilidad, no la macabra con la que estaba acostumbrado.
-Buena suerte en tu misión, Christian.
Neipol apretó el gatillo. La bala salió disparada del arma, entrando de lleno en el pecho de Madmahon. Éste se tiró al suelo de espaldas con la silla, manchando su traje blanco con rojo y dejando caer su sombrero. La insignia de Player salió volando, atravesada por la bala y rota en dos, dividiendo el corazón en dos partes; izquierda y derecha.
El cadáver de Madmahon dejó su mano derecha abierta, justo donde cayó la mitad de uno de los fragmentos de la insignia. Neipol se levantó de la silla y guardó el revólver. Se dirigió a la salida y vio la otra mitad en el suelo. Se agachó para verla y la recogió. Apretándola con fuerza contra su pecho. La guardó en el bolsillo y se dirigió a la entrada, la cual abrió. Respiró con fuerza el aire, como si lo hiciera por primera vez en toda su vida. Se giró y observó el interior del casino.
-Gracias, Madmahon.
Y tras aquellas palabras, Neipol salió, en busca de Lady y dejando el cadáver del Player en el interior del casino.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Bueno, unas pequeñas palabras de mi parte.
A Narra: Siento que Players haya sido borrado. Seguramente tienes una copia de seguridad de todos los capítulos, pero los comentarios no volverán. Una verdadera lástima D:
A los lectores: Sentimos mucho lo que ha pasado. Eso sí, Players no dejará de publicarse por esto. Y esta es la prueba. Gracias por seguir Players =3
Comentario de este capítulo: No me matéis. Es culpa de Narra, él lo escribió D: